Cuando el sol ya se ocultaba y el reloj marcaba el final de esta intensa jornada de trabajo, la T-20 nos ha entregado su último e inesperado regalo, descubriéndonos un enterramiento más en esta increíble tumba, lo que eleva a 15 la cifra de inhumaciones detectadas en la fosa.
Sin duda, ha sido un enterramiento que se ha hecho esperar. Las tareas de documentación han sido frenéticas para poder documentar a este "colono despistado" que no se había enterado de que sus compañeros habían salido. Por suerte, ya está entre nosotros y con el resto de sus compañeros de fosa.
Ese cráneo, José, parece estar en perfectas condiciones si lo comparamos con los del resto de enterrados. Imagino que pertenecerá a un varón. A ver si se pudiese hacer una reconstrucción forense del rostro. Sería genial.
ResponderEliminarA descansar y el año que viene, más.