La exposición ha sido producida y financiada por la Diputación de Alicante, a través de la Fundación MARQ y el Ayuntamiento de Xixona, exhibiendo un centenar de piezas arqueológicas procedentes de los fondos que atesora el Museo Arqueológico de Alicante producto de las excavaciones realizadas en el Castell de la Torre Grossa de Xixona por el Padre José Belda Domínguez en los años 40 del siglo XX.
Cerámicas de mesa y fuego, hueso trabajado, objetos de bronce, instrumentos agrícolas incluso una arqueta de marfil hallada en un taller de eboraria conforman la mayor parte de piezas que se pueden ver en una exposición que pretende repasar el pasado islámico de la población y los cambios que se operan con la llegada de los cristianos, el cambio de vida y las obras que dejaron en esta villa de frontera con Castilla en época medieval, lo que le permitió ostentar el título de Clau del Regne y llevar las llaves del Reino en el escudo heráldico de la villa.
La muestra se completa con una serie de piezas aportadas por el Ayuntamiento de Xixona y procedentes de la Iglesia gótica de Xixona, ahora recuperada en parte como es un fragmento de clave de bóveda con el escudo de las cuatro barras del Reino de Valencia, nervios de bóveda y un sillar que presenta un juego en una de sus caras. Además, la exposición cuenta con la cesión por parte de un particular de Xixona de una cruz gótica de término, que se encontraba en la salida de la población para el amparo de los peregrinos y caminantes.
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