Diario de una futura arqueóloga

Dejadme que por un día haga una reflexión personal. Nunca definimos cual es el alcance de nuestra actividad. Cómo afectamos a nuestra comunidad. Excavamos, investigamos, vivimos pendientes del yacimiento, de sus detalles y de sus problemas y, a veces, nuestro alrededor, incluso más cercano, desaparece. Acudimos a congresos, hablamos con colegas, damos conferencias, vemos que más o menos la sala cuenta con un número reducido de asistentes y nos decimos a nosotros mismos: cuantos son!!!

Escribimos, publicamos sin llegar a precisar cuantos leerán lo que dejamos escrito. Desconocemos lo que podemos influir desde este nuestro pequeño mundo. Allí, desconocemos la prima de riesgo, ignoramos las bajadas de sueldo, las horas, sólo estamos nosotros y el yacimiento.

Sin embargo, hay ocasiones en que algunas cosas nos sacan de nuestro marasmo general. Acabo de leer un post en un espléndido diario sobre Alejandra, una futura arqueóloga -sin duda- que nos visitó la semana pasada y participó en la actividad del parque Arqueólogos por un día. Sencillamente, y hablo en primera persona pero con todo mi equipo detrás- me he sentido feliz.

Reconozco ante todos que soy feliz. Hacemos con pasión lo que nos gusta, algo hoy en día enormemente difícil. Pero desde que he leído el blog y he visto como Alejandra ha disfrutado en el mismo lugar y con las mismas cosas que disfrutamos nosotros todos los días, he de reconocer que me he sentido aún más feliz.

Merecía hacer un post para hacernos ver que también con lo que hacemos podemos ilusionar y hacer felices a muchos.

Tengo que agradecer enormemente, a Maria Eugenia, madre de Alejandra, el enorme esfuerzo que realiza con el blog diariodeunamujermadreyesposa de donde he extraido estas imágenes y cuya lectura me ha facilitado un sencillo y completo momento de felicidad que en esta ocasión, he querido compartir con todos los que nos siguen. En cuanto Alejandra, no dejes de seguirnos y espero que esa pasión que creo que llevas dentro salga un día. Para entonces, seguro que podremos hacerte un hueco en el equipo de trabajo. Cuento con ello. Es una promesa para el futuro.